sábado, 1 de agosto de 2020

Remienda tu cobija

Remienda tu cobija.

El día de hoy al tender mi cama y revisar objetos que ya no necesito, me di cuenta que la cobija con que me tapo estaba rota, pensé si la dejo así se romperá más, y recordé que cuando niño veía a mi abuela coser ropa, calcetines, entre otras cosas y mi abuelo (mi padre) me enseño a remendar, aunque eso lo entendí ya de grande. Recordé que alguna vez el cosió y un costal para que no se saliera lo que él ponía dentro del costal, busque hilo y aguja, y casi con lágrimas en los ojos recordando esa enseñanza de mi padre empecé a remendar esa cobija que, me ha cobijado por mucho tiempo, así como las personas y como las hemos dañado, ofendido y lastimado, una cobija es como un amigo, tu padre, tu esposa o esposo, hermano. Quienes nos cobijan y en ocasiones lastimamos, rasgamos sus corazones, entonces mi padre me dijo; “pida una disculpa y diga que no lo volverá a hacer” así que continúe remendando mi cobija, ya con más ganas y menos lágrimas, recordando a mis tíos, primos, mi madre y claro mi esposa, que ha sido una cobija para mi. Entonces remienda tu cobija y pide disculpas, no dejes esa cobija o la sabana rota, ya que te seguirá tapando, del frio, calor y de las penas que la vida nos deja aprender.
Dedicado a toda mi familia, Tíos, primos, hermanos, abuelos, padres, hijas, y así como mi padre me enseño a remendar, enseña a tus hijos a hacerlo, no les remiendes nada, deja que ellos lo realicen, y enséñales a perdonarse a ellos mismos y remendar su corazón, una cicatriz no se verá si la muestras con orgullo.
Pedro Sánchez. Jadel2003.

No hay comentarios:

Publicar un comentario