martes, 30 de agosto de 2011

“La mesa de la abuela”


Estos escritos son de fechas anteriores los cuales me enviaron los Caballeros de la Lectura, en una de sus tantas aventuras y batallas contra ese enorme mal, la falta de leer del ser humano.
(Adaptación de un texto de los hermanos Grimm)
Érase una vez, una débil anciana, cuyo marido había fallecido dejándola sola, así que vivía sometida al cuidado de su hijo, su nuera y su nieta. Día tras día la vista de la anciana se enturbiaba y su oído empeoraba y a veces durante la comida las manos le temblaban, tanto que la comida caía de la cuchara. El hijo y su esposa se molestaban muchísimo al verla volcar comida en la mesa y un día, cuando la anciana tiró un vaso de leche, su hijo y su nuera irritaron tanto, que decidieron terminar con esa situación.
Le instalaron una mesita en el rincón, cercano al armario de escobas y la hacían comer ahí como un ignominioso castigo. Ella se sentaba a solas, mirando a los demás con ojos enturbiados por las lágrimas. A veces le hablaban mientras comían, pero habitualmente era para vapulearle, por haber hecho caer un plato  o un tenedor.
Una noche, antes de la cena, la pequeña jugaba en el suelo con sus bloques, y el padre le preguntó amorosamente - ¿qué construye mi pequeña?-, a lo que contesto la inocente niñita – Estoy construyendo una mesita para vos y para mamá, para que puedan comer a solas en el rincón cunado yo sea mayor-. Sus padres al escuchar esto, quedaron sorprendidos, y al momento rompieron en llanto. Esa noche devolvieron a la anciana su lugar en la mesa familiar. Desde entonces ella comió con el resto de la familia, y su hijo y nuera dejaron de enojarse, cuando en ocasiones volcaba la comida.
…………………………………………………………………………………………………………………………….
Lo anterior fue una adaptación de un cuento de los hermanos Grimm (Jacob y Wilhelm Grimm) célebres escritores alemanes, famosos por cuentos, como  “La cenicienta”, “Juan sin miedo”, “Blancanieves”. Sus cuentos son un tanto viscerales, y no como los presentan en las películas de Disney.
Éste en especial se debe tratar, no como una orden moral, si no como reflexión, cuestión de “ ÉTICA”. Si bien somos animales sociales, también lo somos pensantes. Sin  embargo muchas veces prescindimos de esa capacidad. La sociedad en la que estamos integrados, sufre de  imperfecciones (que muchas veces culpamos al mal gobierno, y que sin duda forma parte de esta disfunción),  estos no se abolirán a menos que empecemos a mejorar por nuestra cuenta. Y esto no es realizando marchas o mítines, si no pensando, por que es nuestra mayor cualidad. No es necesario sufrir, como en el cuento, una desilusión, tristeza, dolor, vivir en carne propia lo que es el repudio, el odio, y sin fin de sentimientos que se crean en nosotros por la falta de sabiduría, o pereza mental, como sucede en el cuento de los hermanos Grimm, donde hijo y nuera reaccionaron al sentir en carne propia lo que, ellos mismos hacían con la anciana.
Si te gusto regálalo, como un fomento a la lectura y a la reflexión.
Gracias por leer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario